La himenoplastia es una intervención quirúrgica en la que, mediante una técnica quirúrgica especial (ajuste y unión de los extremos desgarrados del himen, según el grado de tensado deseado de la mucosa y sutura en doble capa, con el objetivo de una reconstrucción estable y permanente) , se restaura la integridad del himen. Las suturas que se utilizan son reabsorbibles, tras la intervención no quedan cicatrices visibles. La operación dura 30 minutos y se realiza bajo anestesia local o general. No se informó dolor después de la intervención, pero se prescribieron analgésicos si era necesario.

El período de recuperación postoperatoria es de 2 semanas, tiempo durante el cual no se permite realizar actividad física intensa, ejercicio y deportes, así como la inserción de tampones durante el ciclo mensual. Es necesario prestar especial atención a la higiene íntima y seguir estrictamente las instrucciones postoperatorias dadas por el cirujano que realizó la intervención. Después de completar el período de recuperación, el himen se encuentra en el mismo estado que estaba antes de la violación de su integridad y, en algunos casos, es posible que la vagina se estreche.

La intervención está indicada para mujeres mayores de 18 años que deseen restaurar su himen por motivos estéticos, psicológicos o religiosos. Se recomienda que la himenoplastia se realice después del final del ciclo mensual.

Con el "primer" contacto sexual subsiguiente, se observará sangrado y posiblemente un dolor mínimo, y la integridad del himen nuevamente se verá comprometida.

La himenoplastia se puede realizar en una intervención quirúrgica combinada con labioplastia, vaginoplastia y corrección del clítoris.